Una divertida web llamada así If the Moon were only 1 pixel y con la coletilla “un modelo a escala tediosamente preciso del sistema solar”. A partir de ese tamaño para la luna, todo está a la escala correspondiente, incluyendo las distancias. Uno se mueve a partir del sol haciendo scroll hacia la derecha, con algún tipo de gesto sobre el ratón, que es donde entra la parte tediosa del asunto, porque las distancias que hay entre los planetas son enormes.
(Por suerte, el autor se apiada de nosotros y ofrece en la parte superior un acceso rápido a los planetas. Incluyendo a Plutón, al que todavía queremos).
Aparte de parecerme una web muy chula (por supuesto, se le enseñé de inmediato a mi hija y la traduje algunos de los mensajes que el autor va dejando en el vacío), también me provoca la sensación de absoluta enormidad. El sistema solar es simplemente inmenso a nuestra escala y recorrerlo en un vehículo normal (como un coche) llevaría siglos.
Me parece en última instancia algo hermoso y también la demostración de que la fantasía del vuelo espacial tripulado no es más que eso, una fantasía febril, una confusión que consiste en trasladar nuestra experiencia en la Tierra a algo que en comparación es casi inconcebiblemente mayor. Somos capaces de apreciar lo sublime, pero no pensar en términos de los sublime.
Las máquinas son otro cantar.
Ellas probablemente sí que puedan aprender a pensar así.