Piezas de madera de doce centímetros de largo, todas iguales, con proporciones 1:3:15, eso es Kapla. Sirven para construir, pero las piezas no encajan entre sí de ninguna forma. Simplemente las vas apilando confiando en que la gravedad los mantengan en su sitio. Son tremendamente divertidas de usar, porque en muchas ocasiones tienes que ingeniártelas para decidir en qué orden construir, de forma que el conjunto no se desmorone.
He intentado construir varios de los ejemplos que vienen en los libros. Que por cierto, son también divertidos por su parte: no te ofrecen instrucciones para crear las construcciones, dándote como mucho alguna indicación, pero en la mayoría de los casos se limitan a una foto y un dibujo si se sienten generosos. Eso te obliga, en muchas ocasiones, a pensar, lo que siempre viene bien.
No sé si yo tendría la paciencia… ¿en el de abajo tuviste que construirte una cimbra? porque sin ella lo veo complicado…
En uno anterior, intenté hacer un soporte con piezas extras. Pero al retirarlo, todo se vino abajo. Al final opté por dejar los huecos para luego encajar las piezas que sobresalen. Fucionó bastante bien.