Hace poco me mostraron un chiste sobre la historia de las bitácoras. No le encontré demasiada gracia y me pareció muy fácil (es decir, usaba la primera idea). Vamos, que me pareció un chiste que trabajándolo un poco se podía hacer mejor. Y sí, claro, así era:
twittermania. En principio no me llama mucho la atención habra que probar y ver.
Fantástico 🙂