El muy buen traductor, y todavía mejor autor, Rafael Marín pasaba unos días en Madrid recluido en un convento (en uno de esos curso de adoctrinamiento para profesores, ya saben). Como el hombre tenía un par de horas libres nos lo llevamos a comer.
Hablamos de todo, como es natural siendo Rafa un conversador genial, especialmente de Buffy y Angel y de simbolismos y metáforas en esas dos series magníficas. También comentamos qué bien estaría una serie con Spike de protagonista.
Y ya que estamos, de Rafa recomiendo encarecidamente su Lágrimas de luz.