He empezado a leer The Blank Slate. The Modern Denial of Human Nature de Steven Pinker. Que va precisamente de eso, de la negativa de ciertos estamentos intelectuales, normalmente asociados con la izquierda y el progresismos, a la existencia de una naturaleza humana de base biológica. Pinker ya ha tratado el tema de refilón en otros libros, especialmente en Cómo funciona la mente, pero en esta ocasión se centra exclusivamente en él.
Quede claro de antemano, que yo no leo el libro para que me convenza. Estoy plenamente convencido de que hay una naturaleza humana biológica innata. Que la evolución ha modelado tanto nuestros cerebros como nuestros cuerpos, y que nos ha dotado de innumerables mecanismos que nos permiten aprender y movernos por el mundo. Pero tal cosa, claro, no implica una creencia en un determinismo biológico absurdo:
I am not, as many people assume, countering an extreme «nurture» position with an extreme «nature» position, with the truth lying somewhere in between. In some cases, an extreme environmentalist explanation is correct: which language you speak is a obvious example, and differences among races and ethnic groups in test scores may be another. In other cases, such as certain inherited neurological disorders, and extreme hereditarian explanation is correct. In most cases the correct explanation will invoke a complex interaction between heredity an environment: culture is crucial, but culture could not exist without mental faculties that allow humans to create and learn culture to begin with. My goal in this book is not to argue that genes are everything and culture is nothing ?no one believes that- but to explore why the extreme position (that culture is everything) is so often seen as moderate, and the moderate position is seen as extreme.
Supongo el problema deriva en parte de que se entiende que la teoría de la evolución darwinista, aplicada a los seres humanos, implicaría de inmediato un mundo que haría feliz a la derecha (incluso prestigiosos intelectuales como Haro Tecglen parecen creer tal cosa). Pero la validez o no del darwinismo es una cuestión científica que debería poder dirimirse por métodos científicos. ¿Implica eso que no debe afectar a nuestras ideologías? En cierta forma sí debe hacerlo, porque afectará a los métodos que usemos para poner en práctica las reformas o cambios que nuestras ideas sociales o políticas nos indiquen, pero no para decidir cuáles son esas ideas. Digamos que para hacer las cosas bien hace falta saber primero, y que partiendo de la ignorancia no se puede hacer nada bueno.
Desde ese punto de vista, no encuentro que existe ninguna contradicción entre la izquierda y la existencia de la naturaleza humana. Es más, una izquierda racional debería aceptar el hecho, una vez demostrado, como un dato más del mundo a tener en cuenta. Lo que debería cambiar, repito, no son nuestras convicciones sino los métodos por los que aspiramos a realizarlas. Véase como ejemplo Una izquierda darwiniana de Peter Singer.
No deja de resultarme curioso que en el asunto del darwinismo la izquierda pueda llegar a aliarse con la religiosidad más reaccionaria.
Pero volvamos al libro.
This book is for people who wonder where the taboo against human nature came from and who are willing to explore whether the challenges to the taboo are truly dangerous or just unfamiliar. It is for those who are curious about the emerging portrait of our species and curious about the legitimate criticisms of that portrait. It is for those who suspect that the taboo against human nature has left us playing without a full deck as we deal with the pressing issues confronting us. And it is for those who recognize that the sciences of mind, brain, genes, and evolution are permanently changing our view of ourselves and wonder whether the values we hold precious will wither, survive, or (as I will argue) be enhanced.
Si estoy convencido, ¿por qué leo este libro? Bien, me interesa el punto de vista de Pinker sobre el origen, desarrollo y entronización de la idea de que el ser humano al nacer es una tabula rasa sobre la que puede escribirse cualquier cosa. Me apetece descubrir qué conclusiones sobre la experiencia humana pueden extraerse de estudiar la naturaleza innata del ser humano. Y también, me apetece ver cómo demuestra que la visión humana resultante es más enriquecedora (sobre lo que no tengo duda) que la dominante hasta ahora.
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