es un buen periódico, pero rara vez sabe corregir sus errores (reconocerlos, sí, que tienen defensor del lector, que debe ser un puesto de lo más desagradecido).
Y cuando El País mete la pata lo hace hasta el fondo. Este fin de semana, su revista dominical publicó un delirante artículo sobre los círculos de la cosecha, donde se divulgaban con total alegría todas las suposiciones e invenciones, por estrambóticas que fuesen, sobre los dichosos circulitos.
Por suerte, navengado por la página de Víctor Ruíz me he encontrado con su comentario sobre el tema y apunta a un interesante recurso con información escéptica sobre los círculos.
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